Los timbres fabricados con linóleo se pueden utilizar sobre diversos materiales. Se elaboran de la misma forma como se hace con la goma de borrar, aunque es necesario cargar mucho más las herramientas, por su mayor dureza. Carolina recomienda partir tallando motivos simples, para evitar cortes. Al momento de comenzar a calar el linóleo, conviene afirmar el material sobre una base pequeña de trupán, ya que así resultará más fácil trabajar. Aunque no es indispensable, este mismo trozo de madera servirá después para sostener el timbre al momento de estampar, ya que resultará más fácil y cómodo.